II Corinthians Capítulo 1
In this letter the apostle Paul writes about his relationship with the Corinthian church and the difficulties that some false prophet had brought to his ministry.
Biblia Reina Valera 1865
1 : 1 Pablo, apóstol de Jesu Cristo por la voluntad de Dios, y el hermano Timoteo, a la iglesia de Dios que está en Corinto, con todos los santos que están por toda la Acaya.
1 : 2 Gracia a vosotros, y paz de Dios nuestro Padre, y del Señor Jesu Cristo.
1 : 3 Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesu Cristo, el Padre de misericordias, y el Dios de toda consolación.
1 : 4 El que nos consuela en todas nuestras tribulaciones; para que podamos nosotros consolar a los que están en cualquiera angustia, con la consolación con que nosotros mismos somos consolados de Dios.
1 : 5 Porque de la manera que abundan en nosotros las aflicciones de Cristo, así abunda también por Cristo nuestra consolación.
1 : 6 Y si somos atribulados, es por vuestra consolación y salvación, la cual es eficiente en el sufrir las mismas aflicciones que nosotros también padecemos; o si somos consolados, es por vuestra consolación y salvación.
1 : 7 Y nuestra esperanza de vosotros es firme, estando ciertos que como sois participantes de las aflicciones, así también lo seréis de la consolación.
1 : 8 Porque, hermanos, no queremos que ignoréis acerca de nuestra tribulación que nos fue hecha en Asia, que sobre manera fuimos cargados sobre nuestras fuerzas, de tal manera que aun dudábamos de la vida.
1 : 9 Mas nosotros tuvimos en nosotros mismos sentencia de muerte, para que no confiásemos en nosotros mismos, sino en Dios, que levanta los muertos:
1 : 10 El cual nos libró de tamaña muerte, y nos libra: en el cual esperamos que aun nos librará;
1 : 11 Ayudándonos también vosotros con oración por nosotros, para que por el don alcanzado para nosotros por medio de muchas personas, por muchas también sean dadas gracias por nosotros.
1 : 12 Porque nuestra gloria es esta, es a saber, el testimonio de nuestra conciencia, que en simplicidad y sinceridad de Dios, no en sabiduría carnal, mas en la gracia de Dios, hemos conversado en el mundo, y más con vosotros.
1 : 13 Porque no os escribimos otras cosas de las que leéis, o también reconocéis; y espero que aun hasta el fin las reconoceréis:
1 : 14 Como también en parte nos habéis reconocido que somos vuestra gloria, como también vosotros sois la nuestra, en el día del Señor Jesús.
1 : 15 ¶ Y en esta confianza quise primero venir a vosotros, porque tuvieseis otro segundo beneficio:
1 : 16 Y pasar por vosotros a Macedonia; y de Macedonia venir otra vez a vosotros, y ser llevado por vosotros a Judea.
1 : 17 Así que pretendiendo esto, ¿usé quizá de liviandad? ¿o lo que pienso hacer, piénsolo según la carne, para que haya en mí sí, sí, y no, no?
1 : 18 ¶ Antes como Dios es fiel, nuestra palabra para con vosotros no ha sido sí y no.
1 : 19 Porque el Hijo de Dios, Jesu Cristo, que por nosotros ha sido entre vosotros predicado por mí, y Silvano, y Timoteo, no ha sido sí y no; mas en él ha sido sí.
1 : 20 Porque todas las promesas de Dios son en él sí, y en él Amén para gloria de Dios por nosotros.
1 : 21 Y el que nos confirma con vosotros en Cristo, y el que nos ungió, es Dios:
1 : 22 El cual también nos selló, y nos dio las arras del Espíritu en nuestros corazones.
1 : 23 Mas yo llamo a Dios por testigo sobre mi alma, de que por perdonaros, no he venido hasta ahora a Corinto:
1 : 24 No que nos enseñoreamos de vuestra fe; antes somos ayudadores de vuestro gozo, porque por la fe estáis en pie.