Job Capítulo 6
The question" Why do innocent people suffer?" Is addressed in this biblical story.
Biblia Reina Valera 1865
6 : 1 Y respondió Job, y dijo:
6 : 2 ¡Oh si se pesasen al justo mi queja y mi tormento, y fuesen alzadas igualmente en balanza!
6 : 3 Porque [mi tormento] pesaría más que la arena de la mar: y por tanto mis palabras son cortadas.
6 : 4 Porque las saetas del Todopoderoso están en mí, cuyo veneno bebe mi espíritu; y terrores de Dios me combaten.
6 : 5 ¿Por ventura gime el asno montés junto a la yerba? ¿O brama el buey junto a su pasto?
6 : 6 ¿Comerse ha lo desabrido sin sal? ¿o habrá gusto en la clara del huevo?
6 : 7 Las cosas que mi alma no quería tocar antes, ahora por los dolores son mi comida.
6 : 8 ¡Quién me diese que viniese mi petición, y que Dios me diese lo que espero!
6 : 9 ¡Y que Dios quisiese quebrantarme; y que soltase su mano, y me despedazase!
6 : 10 Y en esto crecería mi consolación, si me asase con dolor sin tener misericordia: no que haya contradicho las palabras del Santo.
6 : 11 ¿Qué es mi fortaleza, para esperar aun? ¿Y qué es mi fin, para dilatar mi vida?
6 : 12 ¿Mi fortaleza, es la de las piedras? ¿o mi carne, es de acero?
6 : 13 ¿No me ayudo cuánto puedo? ¿y con todo eso el poder me falta del todo?
6 : 14 ¶ El atribulado es consolado de su compañero: mas el temor del Omnipotente es dejado.
6 : 15 Mis hermanos me han mentido como arroyo; pasáronse como las riberas impetuosas,
6 : 16 Que están escondidas por la helada, y encubiertas con nieve,
6 : 17 Que al tiempo del calor son deshechas; y en calentándose, desaparecen de su lugar.
6 : 18 Apártanse de las sendas de su camino, suben en vano, y se pierden.
6 : 19 Miráronlas los caminantes de Temán, los caminantes de Sabá esperaron en ellas:
6 : 20 Mas fueron avergonzados por su esperanza; porque vinieron hasta ellas, y se hallaron confusos.
6 : 21 Ahora ciertamente vosotros sois como ellas: que habéis visto el tormento, y teméis.
6 : 22 ¿Héos dicho: Traédme, y de vuestro trabajo pagád por mí,
6 : 23 Y librádme de mano del angustiador, y redimídme del poder de los violentos?
6 : 24 Enseñádme, y yo callaré; y hacédme entender en que he errado.
6 : 25 ¡Cuán fuertes son las palabras de rectitud! ¿y qué reprende, el que reprende de vosotros?
6 : 26 ¿No estáis pensando las palabras para reprender; y echáis al viento palabras perdidas?
6 : 27 También os arrojáis sobre el huérfano; y hacéis hoyo delante de vuestro amigo.
6 : 28 Ahora pues, si queréis, mirád en mí: y ved si mentiré delante de vosotros.
6 : 29 Tornád ahora, y no haya iniquidad; y volvéd aun a mirar por mi justicia en esto:
6 : 30 Si hay iniquidad en mi lengua: o si mi paladar no entiende los tormentos.